A disposición judicial un empresario agrícola en Arahal por un supuesto delito contra los derechos de los trabajadores durante el verdeo.

• Al autor de estos hechos se le han instruido diligencias por un supuesto delito contra el derecho de los trabajadores.
• Se llegó a quedar, supuestamente, con la tarjeta de empleo como medida de presiòn para no pagarles según el convenio y ejercer presión sobre el colectivo.

Sevilla, 27 de octubre de 2014.- Efectivos de la Guardia Civil de la Comandancia de Sevilla, en el día de ayer, ponen a disposición judicial a un empresario del sector agrario al emplear, supuestamente, a varios trabajadores en una finca de Arahal de manera irregular y como fruto de las distintas operaciones de control que este Cuerpo viene realizando en la provincia en este sector.

Actuaciones que viene realizando la Guardia Civil, en concreto con el Servicio de Información de este Cuerpo, en estrecha coordinación y colaboración con efectivos de la Delegación de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social de Sevilla, donde en este caso también participan efectivos de la Benemérita del municipio arahalense.

 Las actuaciones de la Guardia Civil y de los inspectores de la Seguridad Social que se remontan a finales de septiembre, que es cuando se tiene conocimiento de la existencia de supuestas infracciones alrededor del incumplimiento del convenio colectivo asociado a la recogida de aceituna en una finca en Arahal.

 Así las cosas, en la finca los inspectores y agentes de este Cuerpo localizan a 41 trabajadores recogiendo aceitunas, donde no se localiza en el “tajo” la persona que los contrató, llegándose a detectar algunas infracciones de menor entidad y donde ninguno de los trabajadores quería denunciar las condiciones de trabajo en los que se encontraban.

 Transcurridos unos días, uno de estos trabajadores acude a dependencias de la Guardia Civil de Arahal y denuncia una serie de irregularidades en la contratación de los trabajadores.

Circunstancias, éstas, que derivaron en contratarlos de forma verbal y con unos objetivos laborales no se cumplían conforme avanzaban los días, de ahí que el jornal nunca llegaba a lo pactado, empleándolos en las zonas de menor producción.

Luego, el ahora puesto a disposición judicial, y según la denuncia recibida en las dependencias de la Guardia Civil, obligaba a los trabajadores, supuestamente, a recoger por cuadrilla unas 200 cajas de aceitunas. Además, que después de ocho días de trabajo no se les abonó el salario pactado según los convenios establecidos.

 Esta situación provocó la queja y protesta de algunos trabajadores y, por ello, y siempre según la denuncia, el contratista les hizo que saliesen de la finca, echándolos del tajo y sin la tarjeta de demanda de empleo. Incluso, sin abonarles los trabajos realizados.

 Antes tales hechos, y después de una segunda inspección, la Guardia Civil y los Inspectores de la Seguridad Social le instruyen diligencias a este empleador por un supuesto delito contra el derecho de los trabajadores por todos estos hechos, donde previsiblemente actuó con notable superioridad sobre los trabajadores.

Abuso, que provocaría una situación de superioridad hacia los trabajadores, perjudicando, limitando y restringiendo los derechos de éstos en la recogida de aceituna según el convenio respectivo. Incluso, por el uso de métodos de coacción con veladas amenazas al decirles, en alguna ocasión, que irían a cobrar a un bar donde estarían sus “amigos”, en claro tono amenazante.

 Por todos estos hechos el Servicio de Información de la Guardia Civil de Sevilla ha instruido diligencias por un supuesto delito contra los derechos de los trabajadores, dando cuenta al Juez de Marchena.