Los
agentes asistieron a la parturienta que se vio obligada a detenerse
en un arcén de la carretera para dar a luz ante la inminencia
del alumbramiento.
Los Guardias Civiles fueron los primeros en tomar entre sus manos al
recién nacido, quien precisó de maniobras de reanimación
practicada por ellos mismos al no reaccionar en los primeros
instantes.
Imagen de archivo |
Tras recorrer la carretera los agentes localizan
el vehiculo en una de sus salidas parado en el arcén con las luces de
emergencia encendidas en un gran despoblado. La escena que
encontraron fue la de una mujer semidesnuda tendida en el interior del
vehículo con los dolores que anunciaban el alumbramiento de forma
inmediata - ya que incluso se vislumbraba la parte superior de la
cabeza del neonato- así como un padre que rogaba a los agentes
que los auxiliaran.
Haciéndose cargo de la situación y tranquilizando a la pareja, los agentes deciden que ya no hay tiempo para el traslado de la parturienta en ambulancia al hospital y que el parto debe producirse allí mismo.
Los
agentes, asistidos telefónicamente por los servicios de asistencia
sanitara 112, acomodan a la parturienta y asisten al nacimiento de un
niño que es recibido al mundo por las manos de uno de los
Guardias Civiles.Tras los primeros instantes observan como el niño
no reacciona por lo que le aplican masajes que traten de estimularlo
sin resultado, por ello deciden insuflarse aire por su boca-nariz
hasta la llegada de una ambulancia medicalizada que estabiliza al
recién nacido y su madre, siendo trasladados inmediatamente al centro
médico.
Ambos
permanecen en buen estado de salud recibiendo los agentes las efusivas
muestras de agradecimiento de los felices padres y familiares.
No obstante, Rubén Berdugo, padre del niño, matiza en declaraciones a la prensa, la versión dada por la Guardia Civil, ya que, según él, las maniobras de reanimación al recién nacido "se produjeron para estimularlo y que rompiera a llorar, no porque no reaccionara en los primeros instantes".
Ampliación
No obstante, Rubén Berdugo, padre del niño, matiza en declaraciones a la prensa, la versión dada por la Guardia Civil, ya que, según él, las maniobras de reanimación al recién nacido "se produjeron para estimularlo y que rompiera a llorar, no porque no reaccionara en los primeros instantes".
Además, afirma que él fue el primero en tomar en sus manos al bebé, el cual "ya había nacido cuando
ellos llegaron, yo lo recogí y lo puse en el regazo de la madre". Rubén Berdugo, añade que el lugar del nacimiento
fue en la salida de San Juan de Dios y que los guardias "ayudaron para que la ambulancia del
061 no se perdiera, llegara al lugar exacto y nos trasladaron en la
ambulancia hacia el hospital".
Agentes que auxiliaron en el parto |
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