Por una parte, a partir de esta fecha todos los parques de bomberos de la provincia permanecerán abiertos 24 horas, con sus efectivos en presencia; por otra, se incorporarán progresivamente bomberos funcionarios en todos los parques, al menos en un 33%, es decir: ya en 2015, al menos 1 de cada 3 bomberos del Sistema será funcionario. Esto se traduce en que cada parque va a contar con un mínimo de 5 bomberos funcionarios, de forma que uno de estos funcionarios esté siempre al frente de cada turno.
Además, el Sistema de Bomberos de la Provincia amplía el año que viene su plantilla en 70 bomberos funcionarios. Los primeros 20 se integran al Sistema a través de plazas creadas por la Diputación de Sevilla y ejercerán, desde hoy mismo, sus labores en los parques de Estepa, Osuna, Lora del Río y Cantillana.
Las otras 50 plazas serán creadas y ofertadas por los ayuntamientos de los municipios que cuentan con parque de bomberos y están adheridos al Sistema, en la modalidad de cobertura que cada uno de ellos elija y serán financiadas por los propios ayuntamientos, a través de subvenciones directas, de en torno a 200 mil euros, que reciben de la Diputación, entidad que, también, se ocupa de dotar a los parques de equipamiento y vehículos.
En realidad, el objetivo que se marca el Programa de Transición es que la dotación de bomberos de la provincia alcance los 659 efectivos, de los que 409 sean funcionarios y 250 voluntarios, es decir, una correlación de 62/38 por ciento, frente al 50/50 que el Sistema tiene en la actualidad.
No obstante, la Diputación pretende mantener la cooperación con los bomberos voluntarios, en sintonía con la Ley de Emergencias Andaluza y con la corriente europea en este sentido.
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